El mes pasado se aprobó el Plan Estatal para el acceso a la Vivienda 2022-2025

Ya está aprobado el nuevo Plan Estatal de Vivienda 2022-2025, que presta atención a los sectores más desfavorecidos de la población. Es el plan que desde el gobierno cada cuatro años financia el acceso a la vivienda. En esta ocasión se trata de un plan muy ambicioso porque incorpora un aumento de los recursos económicos, inyectando fondos europeos procedentes del plan de recuperación, que presta atención a los sectores más desfavorecidos de la población e incluye una dotación presupuestaria de 1.700 millones de euros para ayudas estatales a la vivienda. Sólo queda pendiente que dichos fondos sean transferidos a las comunidades autónomas mediante los convenios pertinentes.

Este nuevo Plan Estatal de vivienda incluye un buen número de programas, donde el más publicitado es el de las ayudas al alquiler de 250 € para jóvenes. Esta medida ya ha sido calificada como poco conveniente por los movimientos sociales de vivienda, entre otras cosas porque supone un traspaso de fondos públicos a manos privadas y porque contribuye a la burbuja del alquiler porque finalmente los caseros repercuten esta ayuda en los precios que cobran a sus inquilinos.

Nos parece más interesante, y esta ley lo califica de prioritario, es decir, a aplicar antes que cualquier otro, el Programa de ayudas a las víctimas de violencia de género, personas objeto de desahucio de su vivienda habitual, personas sin hogar, otras personas especialmente vulnerables y de ayuda a las personas arrendatarias en situación de vulnerabilidad sobrevenida. Esta medida supone que pondrán a disposición de estas personas una vivienda de titularidad pública o privada adecuada a sus circunstancias. Esperamos que este programa se ponga en marcha lo antes posible y sirva de verdad para paliar las decenas de miles de desahucios de familias vulnerables que se producen cada año en nuestro país.

El siguiente programa en orden de prioridad y donde se exige aplicar el 10% de toda la financiación del Plan es el Programa de Ampliación de los Parques Públicos de Vivienda. Una medida mucho más eficaz, que los expertos y los movimientos sociales por el derecho a la vivienda vienen reclamando desde hace mucho tiempo. En primer lugar, porque supone el recurso con el que se puede cumplir con el programa de dotar de una alternativa a las familias más vulnerables; porque un parque público amplio es la medida que regula de manera natural el mercado del alquiler hacia unos precios más justos; y porque es la medida más exitosa que han implementado nuestros vecinos europeos para atajar el problema del acceso a la vivienda.

El siguiente programa que se establece también como prioritario y al que va dedicado al menos un 10% de toda la financiación del Plan, es la puesta a disposición de las viviendas de la SAREB (Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria) a las comunidades autónomas y ayuntamientos, para destinarlas a alquileres sociales o asequibles. Recordemos que la formación de este «Banco Malo» se realizó con recursos públicos de todos los españoles para recomprar a los bancos sus activos tóxicos y que la ruinosa gestión de esta sociedad ha generado una deuda que finalmente ha asumido el estado.

Merece la pena destacar también el Programa de ayuda a la erradicación de zonas degradadas, del chabolismo y la infravivienda. Recordemos la situación de infraviviendas y las dificultades de acceso a los suministros que viven zonas como la Cañada Real Galiana de Madrid o Las Sabinas de Móstoles, donde se hacinan miles de familias que necesitan ser realojadas. Ésta es una exigencia social desde la Unión Europea y con este Plan las Comunidades Autónomas no tendrán excusa para dotar de una vivienda digna y adecuada a quienes más lo necesitan.

Otros Programas de este Plan se refieren a ayudas para dotar de viviendas a jóvenes en la España Vaciada, viviendas modelos cohousing intergeneracionales, rehabilitación de viviendas para personas mayores o con discapacidad, alquileres privados asequibles y otros. Desde el movimiento de derecho a la vivienda estaremos vigilantes para que este Plan 2022- 2025 se ponga en marcha lo antes posible, que se evalúen las medidas regularmente para asegurarse de su cumplimiento y su eficacia y que de verdad sirvan para hacer efectivo el derecho a una vivienda digna y adecuada en este país.








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