PRESENTACIÓN DE LA CAMPAÑA “LA VIVIENDA NO ES DELITO” (Fotos: Raúl Capín)

El pasado 1 de marzo se presentó en el centro cultural “la Casa del Reloj” de Madrid la campaña “LA VIVIENDA NO ES DELITO”

La Vivienda no es delitoLA VIVIENDA NO ES DELITO es el necesario esfuerzo que ha hecho la Coordinadora de Vivienda de Madrid por poner encima de la mesa la realidad de la ocupación de viviendas en esta comunidad. Frente a las instituciones y los medios de comunicación tradicionales, que siempre nos cuentan las verdades del banquero y hablan de la persona que ocupa una vivienda como antisistema, conflictiva y que, básicamente, pretende vivir del cuento, el informe con el que arranca esta campaña nos muestra la realidad: familias como la suya y la mía, familias que hacen suyo el derecho que les da la Constitución a tener una vivienda digna, familias que se han visto abocadas a entrar en una casa cuando su otra alternativa era vivir en la calle, y que viven con el miedo de que al día siguiente la policía las devuelva a esa calle. En definitiva, familias dignas, que quieren pagar por su casa en función de sus ingresos, y vivir sin miedos.

Arrancó el acto con la bailarina Paula Quintana interpretando un fragmento de su coreografía“Latente”, mientras sonaba “No hay tanto pan” de Silvia Pérez Cruz. Emocionante y, por momentos, inquietante.

A continuación, dos miembros de la Obra Social de la PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca) explicaron qué es nuestra Obra Social y repasaron su historia: en esencia, recuperar edificios vacíos de bancos y Sareb para que las familias sin vivienda pueda vivir. Como advirtió Rafael Boeta, presentador del acto, “quienes dan vida a las casas, son las personas” y una casa vacía, no es tal. Es por ello que liberar inmuebles abandonados es devolverles la vida: vuelven a ser un hogar, su verdadera función.
Pasó entonces a proyectarse el vídeo “FAMILIA”: un testimonio real de cómo una familia se ve obligada a formar parte de nuestra Obra Social, porque el sistema no le deja otra alternativa. Una historia que sin duda puede aplicarse a casi todas las personas que ocupan.
A continuación, vino el acto central: la presentación del libro / informe “LA VIVIENDA NO ES DELITO”. Editado por la mítica “El Viejo Topo”, cuenta en casi 250 páginas la realidad de la ocupación en Madrid, explicando cómo son las familias que ocupan, y por qué se ocupa en esta comunidad. Mediante datos y entrevistas, señala cómo la especulación urbanística e inmobiliaria ha causado una situación de emergencia habitacional, y cómo ello ha dado lugar al auge de la ocupación. Nos revela las experiencias de las personas que han tenido que recuperar una vivienda, cómo es vivir en un piso ocupado y cuál ha sido la respuesta de las instituciones: la criminalización. El final del libro explica cómo la ocupación es el último intento para buscar lo que según nuestras leyes deberíamos tener: derecho a una vivienda digna.
A partir de aquí, se entrelazaron proyecciones de vídeos contando la experiencia de las asambleas de la Obra Social y la historia particular del edificio Llerena, un inmueble recuperado en el barrio de Vallecas, con conversaciones al estilo de las que hacía el Banco Sabadell en su publicidad. Eso sí, esta vez no eran dos personajes famosos, triunfadores a la vista de esta sociedad, y que hablaban de lo bien que lo habían hecho en su vida. Esta vez las conversaciones fueron más reales, situaciones por las que pasan las personas que se han visto forzadas a ocupar una vivienda:
Una usuaria de servicios sociales ante la trabajadora social.
• Una jueza ante una vecina condenada por usurpación.
• Una estudiante de once años, que nos relata lo que es vivir un proceso de desahucio y ser expulsada de su colegio por pedir firmas para evitarlo, mientras niños y adultos la           estigmatizan por su situación vital, frente a su maestra.

En este bloque del acto también intervino un psicólogo para hablarnos de las consecuencias que tienen sobre la salud, estos procesos de desahucio.
Casi para terminar, se explicó la Iniciativa Legislativa Popular de una ley de vivienda que la Coordinadora de Vivienda de Madrid ha presentado en la Asamblea de Madrid, junto a la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid, y la Asociación Libre de Abogadas y Abogados. Una ley, que a la luz de todo lo visto hoy, es absolutamente imprescindible en nuestra Comunidad Autónoma, y que debe aprobarse.
Y llegó la guinda de la emoción: la actuación de la escuela de baile “EL REVUELO”, donde niñas y niños nos recordaron el grito que es necesario tener siempre en mente: ¡SÍ SE PUEDE!

“LA VIVIENDA NO ES DELITO” es la reivindicación de lo que debería ser obvio: que la vivienda es un derecho y que, como tal, nuestra sociedad debería crear mecanismos que la garantizasen. Descriminalizar la ocupación de viviendas por necesidad, y promover leyes más justas que construyan un futuro donde no haya gente sin casa, ni casas sin gente, debe ser una obligación en una sociedad justa, democrática y avanzada. No lo seremos mientras no entendamos esta realidad.